Revisan expertos mural ‘Alegoría de la Producción’, en el Centro de las Artes
El mural “Alegoría de la Producción”, del artista creador duranguense Fermín Revueltas, que domina la entrada principal del Teatro del Centro de las Artes, ha sido revisado para diagnosticar su estado de conservación.
“La Secretaria de Cultura de Nuevo León, en coordinación con el Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León, CONARTE; trabajamos a la par cuidando los bienes patrimoniales que se resguardan en este organismo. En el programa Somos Producción, Somos Revueltas, celebramos 25 años de resguardo de este mural, en este recinto, razón por la cual se ha realizado un diagnóstico del estado de conservación de este maravilloso mural”, mencionó Ana Cristina Mancillas Hinojosa, coordinadora de Patrimonio de la Secretaría de Cultura de Nuevo León.
Tras la exitosa realización por segundo año consecutivo del programa “Somos Producción, Somos Revueltas”, en conmemoración de los 123 años del natalicio del pintor y muralista Fermín Revueltas, y con el que CONARTE busca visibilizar y redescubrir los bienes patrimoniales que se encuentran en su resguardo, el restaurador Gustavo Alemán Castañeda ha sido el responsable de revisar el estado de esta obra monumental.
Las acciones realizadas por el restaurador son el levantamiento de información mediante una inspección física con algunos aumentos, realización de esquemas de deterioro, tomas de fotografía con luz visible, con luz ultravioleta y luz infrarroja, estos tres tipos de radiación permiten observar algunos deterioros que son detectados a simple vista y otros que no lo son. El resultado es la elaboración de un diagnóstico general y una propuesta de conservación que parte de los resultados arrojados del diagnóstico.
“Este trabajo permite alargar la vida de los bienes culturales por un mayor tiempo sin necesidad de llegar a la restauración sino solamente haciendo actividades de conservación preventiva”, detalló Alemán Castañeda.
Este mural fue cedido por 25 años en comodato a CONARTE en octubre del año 2000; se exhibe en la parte superior del vestíbulo del Teatro del Centro de las Artes, ubicado en la Nave II, en el interior del Parque Fundidora.
Realizado en 1934 por encargo del Banco Nacional Hipotecario y de Obras Públicas, el mural tiene un lugar especial dentro del patrimonio artístico de CONARTE. La obra tiene una altura de 3.67 metros, una longitud de 11.71 metros y un área total de 42.97 m2.
El mural fue realizado según la técnica de la pintura al fresco sobre un panel desmontable sobre un panel desmontable, lo que permitió su traslado de la Ciudad de México al recinto en Monterrey.
Representa el equilibrio entre el ambiente natural y su intervención con obras constructivas creadas por la mano e ingenio del hombre; así, la tierra, el mar y las montañas, se transforman en carreteras, presas y toda clase de elementos progresistas.