Cuando ‘Correr para vivir’ es un sentimiento esperanzador
En su ópera prima “Correr para vivir”, el director mexicano Gerardo Dorantes tiene muy claro el propósito de dejar en la audiencia un sentimiento esperanzador -no por ello ingenuo- de que, pese a lo hostil que sea la vida, el sacrificio y la voluntad humana son capaces de logros inimaginables.
La cinta mexicana llagará a las salas de todo el país este próximo 25 de abril, en la que Dorantes ha querido adentrarse a la problemática que viven los habitantes de la Sierra Tarahumara ante la llegada de la delincuencia organizada.
“Esta propuesta cinematográfica nace de mi interés por capturar, desde una óptica personal, el fenómeno mediante el cual, la delincuencia organizada ha penetrado en el corazón de la región tarahumara y de su comunidad, aprovechándose de sus difíciles condiciones económicas y trastocando su percepción del mundo y sus aspiraciones. Si bien retrata una realidad cruda”, expresa el director.
En la trama, dos hermanos tarahumaras en eterna competencia entre ellos y con un talento único para correr, comienzan a distanciarse. Uno de ellos podría convertirse en el mejor corredor de maratón de todos los tiempos, mientras que el otro ingresa en las filas del crimen organizado como un corredor de drogas entre territorios enemigos.
Cuando el hermano mayor pierde un importante cargamento de drogas, queda endeudado para siempre con los cárteles, poniendo en riesgo su vida y su familia. Esto los llevará a emprender una búsqueda en la que el hermano menor tendrá que enfrentar el dilema de cumplir sus sueños o caer víctima del crimen organizado.
Juntos deben arriesgarlo todo en la esperanza de liberarse del mundo criminal esclavizante, en busca de la libertad y la realización de sus sueños.
El elenco está integrado por: Vladimir Rivera Mata (Omero), Manuel Cruz Vivas (Capo), Eligio Meléndez (Aureliano), Mayra Sérbulo (Felícita), Emma Malacara (Ariche) y Osvaldo Sánchez (Jacinto).